Al menos a mi, cada semana antes de surtir despensa, me entra una enorme flojera el hacer una limpieza del refrigerador y peor si ya ha pasado algún tiempo desde la última limpieza profunda.
Cansada de usar mil productos diferentes y de gastar dinero en guantes, químicos y cremas para las manos, decidí hacer un experimento con dos ingredientes maravillosos que encontramos en la cocina y que son de mis favoritos: limón y bicarbonato de sodio.
Mi refrigerador es de 1.60 m de altura y utilicé 1/3 de taza de jugo de limón y tres cucharadas de bicarbonato de sodio. Al reaccionar el bicarbonato con el limón se produce espuma, pero no noté diferencia entre aplicar la mezcla mientras se produce la reacción o cuando ésta ha pasado.
Una fibra normal para lavar trastes y esta pasta me fueron de gran utilidad, saqué manchas que ya tenian ahí meses y que no había podido sacar con nada, además de que quedó de un blanco reluciente.
Sobra decir que las cáscaras de los limones las puse dentro del jabón para trastes con el que lavé las repisas y las piezas desmontables de las puertas. Todo quedó muy limpio, y lo que es mejor, la cocina olía delicioso, en lugar de acabar yo "fumigada" por el uso de productos químicos de limpieza.
Para el toque final, el carbón que guardo en el refrigerador dentro de una bolsa de papel para absorver los malos olores lo puse al sol mientras limpiaba, ésto es para que se reactive su poder para atrapar los aromas y evitar ese saborcito a "refri" en la comida.
Una cosita muy importante es la siguiente: la mayoría de los refrigeradores tienen un hoyito en la parte de abajo, cerca del cajón de verduras. Es muy importante que el paso esté libre, ya que este agujero sirve para drenar el agua que llega a caer por las paredes del refrigerador, ya sea de algún derrame o de el agua que se genere por condensación. Si está bloqueado, pícalo con un alambre y vierte un par de cucharadas de vinagre blanco. El agua que escurre va a un contenedor encima del motor, de vez en cuando desconecta tu refrigerador y verifica este contenedor, límpialo y si está lleno de agua es momento de que verfifiques si estás derramando líquidos en el refrigerador o si algo está mal con él.
Puedes ver más sobre cómo mantener tu refrigerador limpio y libre de aromas indeseables en la entrada: Cuando toda la comida sabe a refrigerador...
Bien, pues espero que estos sencillos tips te ayuden la próxima vez que limpies tu refrigerador, y si aún no lo has planeado, ¡estás a tiempo! La llegada de la primavera es una excelente ocasión para hacer una limpieza a profundidad te tu hogar.
viernes, 27 de marzo de 2015
miércoles, 11 de marzo de 2015
La limpieza del sarro en el baño
Otra de las pesadillas a las que nos enfrentamos en el quehacer doméstico es la limpieza del sarro que se acumula en el baño. Las paredes, el lavabo, la taza, todo se ve afectado por el molesto sarro y los restos de jabón.
Existen muchos productos para limpiar el sarro, tantos que hay veces que no podemos decidir cuál de ellos es el que más nos conviene.
Te voy a dar un tip que además de efectivo, de va a ahorrar mucho dinero.
Haz una soluciónde una parte de agua y una parte de vinagre blanco, moja una esponja con ella y talla todas las superficies. Es importante que te asegures de mantener la puerta abierta y de tener ventilado el baño mientras haces ésto pues el olor puede resultar molesto.
Vas a notar como inmediatamente se desprenden todos los restos de jabón. En algunas zonas puede ser que la mezcla no sea suficiente, como por ejemplo en los contornos de la regadera, canceles y fondo de la bañera. En estos casos puedes mojar la esponja directamente con el vinagre.
Es sorprendente cómo ayuda.
Yo descubrí esto en un acto de desesperación, cuando después de usar mil productos para la limpieza e incluso recurrir a objetos filosos para desprender el sarro acumulado en algunos puntos de mi baño, decidí aplicar vinagre directamente. Es increíble como se limpió todo. Los azulejos quedaron flamantes y los canceles de un blanco resplandeciente.
El problema de utilizar el vinagre para limpiar el baño de las molestas manchas de sarro es que permanece un olor un tanto desagradable. Te diré cómo combatirlo.
Disuelve una cucharada de bicarbonato de sodio en medio litro de agua. Humedece un paño con esta mezcla y limipa todas las superficies sobre las que hayas aplicado el vinagre. Puedes también añadir el jugo de un limón para aromatizar, además de que el limón también es un agente limpiador muy poderoso.
Es muy importante que enjuages muy bien todos los objetos metálicos que hayas limpiado con vinagre, como lo son las llaves del agua. Esto es para evitar la corrosión de los mismos y, por ende, la aparición de manchas verdes o de óxido.
La otra cuestión es prevenir que el sarro invada tu baño. Esto puede ser particularmente difícil si vives en una zona con agua dura. Sin embargo la limpieza frecuente del baño con un limpiador estándar debe ser suficiente para mantenerlo limpio. Date unos minutos antes de bañarte para limpiar "por encimita" y ten siempre a la mano los limpiadores y las esponjas.
Una buena idea es colocar en algún lugar discreto una bitácora de limpieza, tal como lo hacen en los sitios públicos. Quizá parezca exagerado, pero a mí me ha pasado muchas veces que haciendo cuentas de cuándo fué la última vez que limpié las paredes o hice una limpieza más profunda de mi baño, me doy cuenta que han pasado semanas o incluso un par de meses. Es normal que, por el acelerado ritmo en que vivimos y por la gran cantidad de responsabilidades que asumimos, dejamos muchas de estas tareas para "después" o para "mañana". Y para cuando acordamos, el tiempo ha pasado y la mugre incrustada nos hará perder mucho más tiempo del que nos hubiera tomado una limpieza superficial más frecuente.
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| Imagen cortesía de Davi Alexandre, disponible en Flickr |
Existen muchos productos para limpiar el sarro, tantos que hay veces que no podemos decidir cuál de ellos es el que más nos conviene.
Te voy a dar un tip que además de efectivo, de va a ahorrar mucho dinero.
Haz una soluciónde una parte de agua y una parte de vinagre blanco, moja una esponja con ella y talla todas las superficies. Es importante que te asegures de mantener la puerta abierta y de tener ventilado el baño mientras haces ésto pues el olor puede resultar molesto.
Vas a notar como inmediatamente se desprenden todos los restos de jabón. En algunas zonas puede ser que la mezcla no sea suficiente, como por ejemplo en los contornos de la regadera, canceles y fondo de la bañera. En estos casos puedes mojar la esponja directamente con el vinagre.
Es sorprendente cómo ayuda.
Yo descubrí esto en un acto de desesperación, cuando después de usar mil productos para la limpieza e incluso recurrir a objetos filosos para desprender el sarro acumulado en algunos puntos de mi baño, decidí aplicar vinagre directamente. Es increíble como se limpió todo. Los azulejos quedaron flamantes y los canceles de un blanco resplandeciente.
El problema de utilizar el vinagre para limpiar el baño de las molestas manchas de sarro es que permanece un olor un tanto desagradable. Te diré cómo combatirlo.
Disuelve una cucharada de bicarbonato de sodio en medio litro de agua. Humedece un paño con esta mezcla y limipa todas las superficies sobre las que hayas aplicado el vinagre. Puedes también añadir el jugo de un limón para aromatizar, además de que el limón también es un agente limpiador muy poderoso.
Es muy importante que enjuages muy bien todos los objetos metálicos que hayas limpiado con vinagre, como lo son las llaves del agua. Esto es para evitar la corrosión de los mismos y, por ende, la aparición de manchas verdes o de óxido.
La otra cuestión es prevenir que el sarro invada tu baño. Esto puede ser particularmente difícil si vives en una zona con agua dura. Sin embargo la limpieza frecuente del baño con un limpiador estándar debe ser suficiente para mantenerlo limpio. Date unos minutos antes de bañarte para limpiar "por encimita" y ten siempre a la mano los limpiadores y las esponjas.
Una buena idea es colocar en algún lugar discreto una bitácora de limpieza, tal como lo hacen en los sitios públicos. Quizá parezca exagerado, pero a mí me ha pasado muchas veces que haciendo cuentas de cuándo fué la última vez que limpié las paredes o hice una limpieza más profunda de mi baño, me doy cuenta que han pasado semanas o incluso un par de meses. Es normal que, por el acelerado ritmo en que vivimos y por la gran cantidad de responsabilidades que asumimos, dejamos muchas de estas tareas para "después" o para "mañana". Y para cuando acordamos, el tiempo ha pasado y la mugre incrustada nos hará perder mucho más tiempo del que nos hubiera tomado una limpieza superficial más frecuente.
sábado, 7 de marzo de 2015
¡La casa huele a huevo después de trapear!
Haz provado toda clase de limpiadores y, a pesar de todo , después de trapear percives ese desagradable olor a huevo.
No te preocupes que es algo que a muchas personas les sucede y¡ tiene solución!
Lava tu trapeador con detergente
No es suficiente con enjuagar tu trapeador con agua después de cada uso. Lavarlo con detergente es un excelente hábito que lo mantendrá limpio y listo para ser utilizado en caso de alguna emergencia.
Cambia el agua con la que trapeas
Es importante que trapees con agua limpia. En lugar de llenar una tina de 10 litros de agua, utiliza solo 5 litros y cambia el agua cuando ésta se empiece a ver sucia, después de todo, no tiene ningún efecto enjuagar el trapeador en agua sucia.
Si el piso está muy sucio...
Dale a tu piso una segunda trapeada con agua y cloro (5 litros de agua y 1 cda. de cloro). Además de que eliminarás los restos del limpiador y las posibles rayas del suelo, lograrás acabar con bacterias y recoger la suciedad que haya quedado en la primera pasada.
Para el piso de la cocina...
Prueba disolver el jugo de un limón en el agua con la que trapearás. El limón ayudará a disolver la suciedad que suele acumularse.
Recuerda, mantener tus pisos limpios es más sencillo si regularmente trapeas y no permites que la mugre se acumule.
Otra buena idea, que es de hecho costumbre en muchos países, es evitar andar por la casa con los mismos zapatos que usas en la calle. Puedes, por ejemplo, poner un armario en la entrada y cambiar tus zapatos por unas cómodas pantuflas o unas sandalias en el verano.
No te preocupes que es algo que a muchas personas les sucede y¡ tiene solución!
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| Imagen cortesía de Parker Knight disponible en Flickr |
Lava tu trapeador con detergente
No es suficiente con enjuagar tu trapeador con agua después de cada uso. Lavarlo con detergente es un excelente hábito que lo mantendrá limpio y listo para ser utilizado en caso de alguna emergencia.
Cambia el agua con la que trapeas
Es importante que trapees con agua limpia. En lugar de llenar una tina de 10 litros de agua, utiliza solo 5 litros y cambia el agua cuando ésta se empiece a ver sucia, después de todo, no tiene ningún efecto enjuagar el trapeador en agua sucia.
Si el piso está muy sucio...
Dale a tu piso una segunda trapeada con agua y cloro (5 litros de agua y 1 cda. de cloro). Además de que eliminarás los restos del limpiador y las posibles rayas del suelo, lograrás acabar con bacterias y recoger la suciedad que haya quedado en la primera pasada.
Para el piso de la cocina...
Prueba disolver el jugo de un limón en el agua con la que trapearás. El limón ayudará a disolver la suciedad que suele acumularse.
Recuerda, mantener tus pisos limpios es más sencillo si regularmente trapeas y no permites que la mugre se acumule.
Otra buena idea, que es de hecho costumbre en muchos países, es evitar andar por la casa con los mismos zapatos que usas en la calle. Puedes, por ejemplo, poner un armario en la entrada y cambiar tus zapatos por unas cómodas pantuflas o unas sandalias en el verano.
miércoles, 4 de marzo de 2015
Limpiar la estufa: acaba con la pesadilla
Seguramente si estás leyendo esto, te has enfrentado al problema que implica limpiar la estufa. Quizás te has cansado de comprar toda clase de productos de limpieza que lo único que hacen es vaciar tus bolsillos y maltratar tus manos.
Bueno, pues yo, como tú, he tenido que enfrentarme muchas veces a ese problema. Te diré que lo mejor que puedes hacer es limpiar la estufa después de cada uso. No hay nada mejor que utilizar agua tibia para suavizar los restos de comida derramada y después, con polvo para lavar trastes en seco o con una crema microabrasiva puedes dar el toque final.
Pero seamos honestos, a todos nos da flojera hacer esto y más de una vez nos encontramos después de unos días con que lo que parecían unas cuantas manchitas, es en realidad una misión imposible.
Aquí te dejo algunos tips para desincrustar las manchas de cochambre de las superficies de tu cocina.
Si tu estufa es sellada, puedes poner un poco de agua caliente y dejarla unos minutos. Esto aflojará las manchas más fáciles de sacar.
A continuación puedes hacer una pasta de bicarbonato de sodio y vinagre. Con ella vas a tallar la superficie a limpiar. Si no actúa de inmediato, déjala actuar por un par de horas. Para ayudarte a tallar, consigue una fibra de lana de acero. Es muy fina y permite tallar sin dañar el esmalte u otras superficies de la cocina. Esta mezcla, además, dejará las superficies blancas relucientes.
Para limpiar el horno puedes utilizar la misma mezcla y encenderlo unos minutos a la mínima temperatura. Verás que después es mucho más fácil limpiar las manchas impregnadas.
Nunca utilices objetos filosos o lijas para quitar las manchas de cochambre, pues dañarás la superficie, y lo único que conseguirás es que después la mugre se pegue con más facilidad. Si una mancha es particularmente difícil de sacar, prueba tallarla en seco con bicarbonato de sodio o con polvo para lavar trastes.
Y para finalizar, solo resta recalcar que limpiar tu cocina con una crema microabrasiva regularmente ayuda a mantener las superficies limpias y libres de las molestas manchas de cochambre.Solo asegúrate de que no queden restos de ella en las superficies donde colocarás alimentos.
Bueno, pues yo, como tú, he tenido que enfrentarme muchas veces a ese problema. Te diré que lo mejor que puedes hacer es limpiar la estufa después de cada uso. No hay nada mejor que utilizar agua tibia para suavizar los restos de comida derramada y después, con polvo para lavar trastes en seco o con una crema microabrasiva puedes dar el toque final.
Pero seamos honestos, a todos nos da flojera hacer esto y más de una vez nos encontramos después de unos días con que lo que parecían unas cuantas manchitas, es en realidad una misión imposible.
Aquí te dejo algunos tips para desincrustar las manchas de cochambre de las superficies de tu cocina.
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| Imagen cortesía de vampraver, disponible en Flickr |
Si tu estufa es sellada, puedes poner un poco de agua caliente y dejarla unos minutos. Esto aflojará las manchas más fáciles de sacar.
A continuación puedes hacer una pasta de bicarbonato de sodio y vinagre. Con ella vas a tallar la superficie a limpiar. Si no actúa de inmediato, déjala actuar por un par de horas. Para ayudarte a tallar, consigue una fibra de lana de acero. Es muy fina y permite tallar sin dañar el esmalte u otras superficies de la cocina. Esta mezcla, además, dejará las superficies blancas relucientes.
Para limpiar el horno puedes utilizar la misma mezcla y encenderlo unos minutos a la mínima temperatura. Verás que después es mucho más fácil limpiar las manchas impregnadas.
Nunca utilices objetos filosos o lijas para quitar las manchas de cochambre, pues dañarás la superficie, y lo único que conseguirás es que después la mugre se pegue con más facilidad. Si una mancha es particularmente difícil de sacar, prueba tallarla en seco con bicarbonato de sodio o con polvo para lavar trastes.
Y para finalizar, solo resta recalcar que limpiar tu cocina con una crema microabrasiva regularmente ayuda a mantener las superficies limpias y libres de las molestas manchas de cochambre.Solo asegúrate de que no queden restos de ella en las superficies donde colocarás alimentos.
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